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Alan Turing. Imagen robertsharp.co.uk

Parlamento británico “perdonará” homosexualidad de genio matemático y padre de computadoras, Alan Turing

Publicado: 2013-07-24

Alan Turing fue un gran genio matemático que, por su compromiso con la seguridad nacional de Inglaterra, no fue reconocido públicamente sino hasta después de su muerte. Ya en 1936, escribió el primer modelo teórico de computadora con inteligencia artificial a base de algoritmos.

Durante la Segunda Guerra Mundial, descifró el código secreto que usaba la máquina llamada ‘Enigma’, que empleaban los nazis para encriptar sus comunicaciones. Es considerado como el padre de la computadora y de la inteligencia artificial. Pero por ser homosexual, fue condenado a una castración química que le hizo crecer senos y lo dejó impotente, propiciando su suicidio poco tiempo después. ¿Cómo empezó todo?

En 1952, fue víctima de un robo en su domicilio. Por entonces, había iniciado una relación amorosa con Arnold Murray, que era un joven desempleado de 19 años a quien había conocido en Manchester.

Su amante le confesó que el autor del robo fue un amigo suyo, y Turing decidió denunciarlo a la policía. Cumplir con su deber ciudadano marcaría el principio del fin del genio. La homosexualidad era un delito entonces en Gran Bretaña, y Turing y Murray fueron condenados por «indecencia grave».

En 2009, el entonces primer ministro Gordon Brown, pidió disculpas públicas por cómo fue tratado el científico en la época. El año pasado, una petición de más de 20.000 personas, difundida con motivo del centenario de su nacimiento, fue desatendida por el gobierno actual, por tratarse de una conducta considerada como delictiva por las leyes de la época.

En diciembre del año pasado, un grupo de científicos británicos, entre los que figuraba Stephen Hawking, exigió de nuevo, mediante una carta al «Daily Telegraph», el «perdón póstumo», para quien definen como «uno de los más brillantes matemáticos de nuestra era».

«Y, a pesar de ello, sucesivos gobiernos británicos parecen incapaces de perdonar su condena por el entonces ¨delito¨ de ser homosexual, que condujo a su suicidio a los 41 años», denunciaban algunos de los principales científicos británicos.

Ahora, el movimiento por restaurar su reputación «oficial», dará un nuevo paso con el debate en la Cámara de los Lores de la ley del perdón a Turing, impulsada por el barón John Sharkey, del partido liberal.

La cámara alta del Parlamento Británico, discutirá en segunda lectura el proyecto de ley, que deberá luego ser adoptado en comisión y en una tercera lectura en los Lores antes de su aprobación oficial.

La ley, que fue presentada en mayo, concede escuetamente «el perdón legal a Alan Mathison Turing, por los delitos según la sección 11 de la ley de enmienda al código penal de 1885, por los que fue condenado el 31 de marzo de 1952».

La iniciativa de los Lores, ha reavivado el debate sobre la conveniencia de «perdonar» a alguien por algo que no es delito hoy día. «Por derecho, tendría que ser Turing el que perdona al gobierno, aunque eso es imposible», defendía este jueves Matt Ridley, analista del diario «The Times». Hay muchos que incluso piensan que quien debería ser sujeto de perdón, no es Turing, si no el propio gobierno británico que en el pasado persiguió y condenó a cientos de ciudadanos solo por ser homosexuales, obligándoloes a la cárcel o a la castración química.

Fue eso, precisamente, lo que hicieron con Turing. Le dieron a elegir entre la cárcel o la libertad condicionada a recibir inyecciones de estrógeno sintético. Optó por lo segundo. Y dijo premonitoriamente: «Saldré de todo esto como un hombre diferente, aunque todavía no he descubierto quién seré».

Un año de ¨tratamiento¨de castración química que lo dejó impotente y le provocó ginecomastia (crecimiento de las glándulas mamarias). Además, perdió sus credenciales de seguridad y no pudo seguir trabajando como consultor en el Cuartel General de las Comunicaciones (GCHQ), que es la agencia secreta envuelta hoy en el escándalo de las escuchas masivas, denunciado por Edward Snowden.

Tras el descubrimiento unos años antes de las actividades de Guy Burgess y Donald MacLean, los dos primeros miembros del círculo de académicos de Cambridge (casi todos homosexuales) que espiaban para los soviéticos, la mezcla de secretos y homosexualidad se había convertido en algo explosivo.

En junio de 1954, con 41 años, Turing se suicidó con una dosis mortal de cianuro.

Edición de César Héctor para Sophimania. Fuente: abc.es y guardian.co.uk.


Escrito por

Sophimania.pe

Del griego Sophia: Sabiduría. Sophimanía es esa 'manía'. esa 'enfermedad' tan humana por saber, descubrir, entender, construir, explorar.


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Sophimanía

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